IMG_0998

Entrevista a Diego Forlán

Extracto de la entrevista con Diego Forlán
 
 
 
Diego Forlán Corazzo (Montevideo, 1979) una de las leyendas del deporte internacional y posiblemente el mejor futbolista Uruguayo de todos los tiempos, se reunió con Récord para platicar un poco sobre su retiro después de 21 años una brillante trayectoria.
Obtuvo dos Botas de Oro (2004-05 y 2008-09) antes de la hegemonía Messi-Cristiano y fue reconocido como el Balón de Oro en el Mundial del 2010. El delantero uruguayo militó en 9 clubes pero su máxima explosión goleadora se dio en España entre el Villarreal y el Atlético de Madrid.
El delantero charrúa llegó acompañado de su inseparable hermano Pablo y tras una cena al mas puro estilo malagueño habló acerca de su despedida el 28 de diciembre en el estadio Centenario, sus inmensas ganas de ser entrenador, sobre el éxito de La Celeste de manos de Óscar Tabárez y también de lo difícil que puede ser consolidarse en el Atlético de Madrid del Cholo Simeone. Con la humildad que lo caracteriza, el `Cachavacha´, respondió a todas nuestras preguntas mientras tomaba un expreso y miraba lo que sucedía en el Holanda vs Irlanda del Norte.
 
Pregunta. ¿Cómo será su despedida del 28 de diciembre en Montevideo?
R. La está preparando mi hermano Pablo con un amigo. Esperemos que el clima acompañe y que la gente pueda ir y disfrutar. Quiero disfrutarlo, que me sorprenda más el momento y diga, ‘esto no me lo imaginaba así’.
 
P. ¿Quiénes te acompañarán ese día en el Centenario?
R. Ya me confirmaron Zanetti, Cambiasso, Milito, Simao, Ujfalusi, Luis Amaranto Perea, Faryd Mondragón… y jugadores de la Selección como Luis Suárez, Cavani , Lugano, Scotti, Godín, Diego Pérez… Una ‘banda’ grande.
 
P. ¿Cuál es el momento que más le marcó como jugador?
R. Es difícil, son muchos, fueron 21 años de trayectoria. Mi debut el 25 de octubre de 1998, sin lugar a duda; el Mundial 2010; la Copa América 2011; la UEFA Europa League con el Atlético. Creo que fueron los momentos más lindos de mi carrera.
 
P. ¿Cuál cree que ha sido el secreto de Uruguay, que siguió ganando pese al cambio generacional que sufrió?
R. El buen trabajo basado en el orden, una metodología y, claro, tener buenos jugadores. A eso hay que sumarle una cabeza como la del Maestro Tabárez, que tuvo tranquilidad para trabajar… porque a veces no la tienes. Seguramente, algún día me toque estar ahí como entrenador y tendré que jugar con esos tiempos y lograr ganar porque es la única manera de mantenerte en el cargo.  Más tarde, ya definiré mi estilo de juego, el que me guste.
 
P. ¿A qué equipo le gustaría dirigir más?
R. Jugué con Uruguay por más de una década, y me encantaría dirigir La Celeste. Si realmente tengo el talento de poder hacerlo, estaré feliz de la vida.
 
P. ¿Qué anécdota recuerda con el Maestro Tabárez?
R. Sí, una graciosa. Llegando a los últimos partidos de la eliminatoria en el 2010, El Maestro, al final de su charla, solía decir: ‘entramos 11 y salimos 11 de la cancha’, advirtiendo de que no haya ninguna expulsión. Lo dijo un día, y nos expulsan uno; al siguiente partido, no lo dijo y no expulsaron a nadie. Otra vez lo dijo y… roja. Entonces, yo compartía habitación con Lugano y le digo: ‘Tota, cada vez que el Maestro dice eso nos echan a uno. Decile vos’. Y hablamos con Abreu también. En un partido contra Ecuador, en el que yo hago el gol de penalti, estábamos todos contentos y fuimos al buffet para servirnos la comida. Entonces, se me acerca Tabárez y le digo: ‘Maestro, con todo respeto, cada vez que usted dice que entramos 11 y salimos 11, nos expulsan a uno. No lo diga más’. Y me dice: ‘¿En serio?’. Y no lo dijo más, lo tomo bien. Pero fue gracioso.
 
 
 
P. ¿Cómo está viendo el inicio de La Liga española? 
R. Muy parejo, y eso está bueno. La Liga ha hecho muy buen trabajo, incrementando el presupuesto de todos. La diferencia con los equipos chicos es menor ahora, pues pueden tener mejores jugadores y pueden competirle mejor al Real Madrid y Barcelona. Queda mucho aún. Dependerá mucho de la cantidad de partidos, el desgaste físico y mental, y las lesiones que puedan llegar a tener.
 
P. ¿Y al Atlético, qué tal lo ve?
R. Va a dar batalla este año, Y es muy meritorio por el recambio de jugadores que se le han ido en estos 4 ó 5 años. Jugadores que han sido bandera del club. Simeone, como líder del grupo, ha tomado decisiones duras, pero el tiempo pasa para todos. Por ahora, sigue ahí, luchando por los títulos. El sprint final es lo que importa. Ahí se ve quién sale campeón, no importa si durante el año estás primero, segundo o tercero. Si el equipo mantiene esa regularidad y llegas a los últimos partidos estando cerca de los primeros puestos, puedes llegar a dar ese batacazo.
 
P. ¿Por qué cree que Héctor Herrera no ha tenido un arranque fuerte?
R. Es un buen jugador, muy importante para México. Estuvo muy bien en el Porto y por algo el Atlético de Madrid se ha fijado en él. Pero no es lo mismo Portugal que España, necesitará cierto periodo de adaptación. También la idea futbolística del entrenador es totalmente diferente. Debe tener paciencia. Con la cantidad de partidos que vienen, tendrá minutos. Quizá Simeone se está tomando el tiempo para no ponerlo tanto al principio, no quemarlo sin necesidad. Probablemente, en la segunda etapa del año, empiece a agarrar su nivel, su continuidad y para el año que viene estamos hablando de un jugador totalmente diferente. Puede convertirse pronto en un jugador clave del Atlético.
 
P. Usted jugó en la Premier y en La Liga. ¿Por qué cree que Raúl Jiménez no brilló en el Atlético y lo hace ahora en la Premier?
R. Es difícil de saber. A veces es algo muy personal. Las condiciones y el talento de Raúl nadie las discute. Necesitas adaptación, pero el futbol no te da tiempo muchas veces y el club, el jugador, el entorno o la familia terminan precipitándose en su decisión de irse. Somos personas. Depende mucho de cómo te encuentras en el día a día, con la familia, en la ciudad… Esas cosas terminan influyendo, y mucho, en un jugador de fútbol.
 
P. ¿Qué recuerdos tiene del choque ante México en el Mundial 2010?
R. Yo los veía muy confiados a los mexicanos. Siempre me gustó jugar contra México. Fueron partidos duros pero, en general, nosotros teníamos claro cómo jugarles. México es una de las Selecciones que mejor juega al fútbol. Manejan un futbol espectacular, proponen, les gusta salir jugando. Nosotros somos más efectivos en general. México va a tener más posesión de la pelota que nosotros. Uruguay siempre tuvo jugadores con mucho gol y ahí les hacemos daño. Seguro que si hiciéramos una liga de 38 partidos contra México, ellos tendrían mejor resultados pero en un partido de eliminación te tiene sin cuidado si juegas o no juegas bien a la pelota, lo que importa es ganar. En ese partido de 2010 México tuvo la posesión de la pelota, pero nosotros contragolpeábamos. En una jugada, yo controlé, giré, se la di a Cavani, que tiró el centro, cabeceó Suárez, y gol. En pelota parada, éramos fuertes y ellos estuvieron constantemente en el arco nuestro pero nosotros defendimos bien y terminamos pasando 1-0.
 
P. ¿Qué cree que le hace falta a la Selección Mexicana para romper la barrera de ese quinto partido?
R. Son muchas cosas. El problema que tiene México es que es una plaza tan fuerte económicamente que los mexicanos ganan muy bien y no salen. Yo, si fuera mexicano y me pagaran así, no me iría. La diferencia tiene que ser grande. Si no, no tiene sentido irme lejos de mi familia. México exporta poco. Si tú ves la selección uruguaya, de los 26 ó 30 seleccionables, todos están en grandes equipos europeos y eso hace que el jugador mejore, compita. Después, cuando regresan a sus respectivas selecciones, se conectan con jugadores locales y empiezan a adquirir conocimientos, experiencia… y aprenden. Eso ha pasado con Ecuador, Chile, Argentina, Brasil…
 
P. ¿Cree que el tiempo de Luis Suárez en el Barcelona está llegando a su fin?
R. Para nada. Yo creo que Luis tiene mucho para dar, es un jugador que se está cuidando físicamente, trabajando bien, y está en un equipo donde no necesita tener un desgaste físico que lo lleve a cansarse. Ahí cada uno tiene claro lo que tiene que hacer y no es necesario correr tanto sino jugar con la pelota. Yo creo que aún tiene para dar, pero dependerá de los intereses del Barcelona. Si ven que es necesario cambiar y que venga otro jugador o no. Como uruguayo, lo vamos a disfrutar más y esperemos poder clasificar al próximo mundial. Va a ser el último Mundial de Luis, Godín y Cavani, y tendrán que disfrutarlo.
 
 

Entrevista a Diego Forlán publicada en el Diario Récord de México
DDB11E2B-7D47-4E1B-BC9D-0B608D5B5178

Aquella final de la Champions en Milán

 

 

 

Alguna vez leí que no importa caer mil veces si se ama la lucha y no la derrota. Estas palabras se me quedaron grabadas y las recuerdo mucho ahora que se acerca nuevamente una final más de la Champions.

Mientras estudiaba el máster en periodismo deportivo en Madrid, Carlita Saucedo, una periodista boliviana, apasionada del fútbol y yo, organizamos un viaje a Italia.

Resulta que en el 2016, la final de la Champions iba a ser en Milán, por lo que cuadramos todo el viaje por las ciudades italianas más turísticas, con la idea de que nuestro último destino fuera precisamente estar en San Siro para vivir un poco el ambiente de esa final entre madridistas y colchoneros.  

Nos levantamos súper temprano. Recuerdo perfecto que para ese entonces, ya me planteaba la idea de quedarme en Madrid más tiempo del previsto, por lo que los gastos que iba a tener en los próximos meses tramitando nueva escuela y nuevo visado, iban a ser fuertes.  

Por esa razón, tenía claro que por mucho que quisiera, no podía pensar en entrar a San Siro. A diferencia mía, el padre de Carlita le había dicho que contaba con todo su apoyo ($$), por si conseguía una entrada en reventa de última hora.  

Hicimos un letrero que decía «compro entrada» y recorrimos las calles de Milán viviendo en cada rincón el ambiente. Llegamos a Il Duomo, el punto medular en el que estaban concentrados todos los hinchas y nos sentamos en unas banquitas a tomar algo.

Platicando con el señor de alado, un español de alrededor de 65 años, nos enteramos que venía de Madrid, que era dueño de restaurantes en la calle «Ponzano», que había viajado solo y que le sobraba una entrada.  

Estaba súper enojado porque se había encontrado a uno de sus habituales clientes del restaurante, quien al ver que le sobraba una entrada, le ofreció ayuda para revenderla.

Lo siguiente que les voy a contar es muy español, les garantizo que muy pocos de los que me lean hubieran hecho lo mismo.

Su enfado era porque el chico que se había ofrecido a vender la entrada, tenía ya un comprador por 1,500 euros (unos 32 mil pesos mexicanos). Entonces, le dijo que con ese dinero recuperara lo que había pagado realmente por la entrada (300 euros) y el restante, o sea (1,200 euros) dividirlo entre los 2. De modo que cada uno ganaría 600 euros, uno por tener la entrada y el otro por venderla.  

Cosa que me parecía hasta cierto punto justa, pero que a mi nuevo amigo le pareció una falta de respeto. Sus palabras fueron clarísimas: «¿Cómo se puede atrever a querer ganar dinero con mi entrada? Una cosa es que yo quiera darle algo por vendérmela y otra muy distinta que quiera sacar provecho. Se la quité inmediatamente, no me importa quedármela».

Estábamos un poco en shock por la historia, pero dos segundos después pensamos que teníamos al candidato perfecto para comprarle la entrada. Le contamos que Carlita únicamente tenía 400 euros y que era uno de nuestros más grandes sueños vivir la final de la Champions, pero que en esta ocasión, ella lo viviría por las dos.  

Lo pensó muchísimo y sólo puso una condición; que lo acompañáramos hasta la puerta del estadio porque no tenía ni idea de cómo llegar. Y así fue. Él entró a San Siro del brazo de Carlita, y yo me tuve que conformar con ver un poco el ambiente a las afueras del estadio.

Vi la final rodeada de italianos en la Piazza della Paz y, aunque no fue dentro del estadio, supongo que la emoción de los penaltis se vive igual en cualquier parte del mundo.

Ahora tengo claro que lo bonito de la vida es nunca perder la capacidad de ilusionarse y siempre tener algo que motive tus días. En aquel momento, fue más grande mi deseo por quedarme en España y, sólo 3 años después la Champions ha vuelto a mí.

Esta semana inician los preparativos para esa gran final en Madrid el 1 de junio. Los ojos del mundo estarán puestos justo aquí y los míos estarán deseando una vez más, contártelo todo.

45661104-0038-4A68-9676-73F42A817C98

El Salón de la Fama aterrizó en Madrid

 

 

 

Hace unos cuantos meses tuve una reunión en Madrid con Antonio Moreno, Director del Salón de la Fama del fútbol nacional e internacional de Pachuca, Hidalgo. Me platicó su deseo de realizar por primera vez en nueve años, la votación para elegir a los nuevos miembros del Salón, fuera de México.

Este Salón, único en su género, tiene un imponente museo en forma de balón y es considerado el punto central para el estudio de la historia del fútbol en México y el mundo. Cuando llega el mes de abril, se realiza la ceremonia de votaciones y durante el mes de noviembre, se premia a los ganadores en un magno evento que se transmite por televisión desde hace un par de años.

Durante esa reunión que sostuvimos en Madrid, me explicó que mi trabajo consistiría en establecer relaciones con periodistas de los principales medios de comunicación de distintos países europeos e invitarlos a la votación. Hacer el contacto directo con periodistas españoles reconocidos en el ámbito deportivo y organizar la rueda de prensa en la que se darían a conocer a los doce nuevos integrantes del Salón de la Fama.

Fueron varios meses de organización coordinando entre México y España todo lo relacionado con el evento, gestionando vuelos, horarios y agendas. Hasta que llegó el día. 

Durante la primera semana de abril aterrizaron en Madrid más de una treintena de periodistas mexicanos y varios directivos del fútbol, empresarios y miembros del comité de honor del Salón de la Fama.  

A este grupo se unieron los periodistas internacionales representando a países como Rusia, Serbia, Inglaterra, Italia, Alemania, Holanda, Bélgica, Turquía, Francia, Portugal y Suiza.

Raúl Orvañanos, David Faitelson, André Marín, Miguel Gurwitz y Javier Solórzano son algunos de los nombres que desde hace varios años participan activamente en el Hall of fame del deporte y que por supuesto, también arribaron a la capital española. 

Los clubes Real Madrid y Atlético de Madrid también quisieron unirse a este festejo y fueron los dos grandes anfitriones. El día que llegó la delegación mexicana, Emilio Butragueño, director de Relaciones Institucionales del club blanco, envió a las habitaciones de cada uno de los invitados a la votación, un pequeño obsequio de bienvenida.

Como parte del calendario de actividades, se ofrecían encuentros con directivos de clubes, comidas, partidos de fútbol, cenas y recorridos turísticos. 

Una de las visitas que más gustó a los mexicanos, fue la del Santiago Bernabéu. Butragueño recibió uno a uno a los visitantes a los que saludó personalmente.

Durante la recepción, explicó su gran amor y conexión con el país azteca, después de vivir en Celaya por tres años y de retirarse de la profesión futbolística en nuestro país.

Posterior al recorrido por las instalaciones del estadio, que casualmente ese mismo día presentó al mundo las remodelaciones que tendrá en los próximos años, se realizó una comida en el restaurante “Puerta 57”, comida que presidieron Florentino Pérez y Emilio Butragueño.

Antes de terminar la visita, el grupo de casi 70 personas recibió una camiseta del Real Madrid personalizada, detalle que emocionó mucho a los presentes

La siguiente parada fue en el Wanda Metropolitano, el nuevo recinto del club rojiblanco que en menos de dos meses albergará la final de la Champions. Esa misma tarde el equipo del Cholo Simeone enfrentó al Girona y la gente del Salón de la Fama pudo disfrutar del partido desde el palco presidencial del estadio.

El jueves 4 de abril, se llevó a cabo la ceremonia de votación en la Casa de México. Un total de 52 periodistas votaron por los 12 nuevos miembros tanto nacionales como internacionales.

Los ganadores fueron: Didier Deschamps, Gabriel Batistuta, Arrigo Sacchi y Javier Zanetti, en la categoría leyendas internacionales. Raymond Kopa fue el ganador en la categoría de Decano Internacional y Sissi triunfó en la categoría femenil internacional.

Dentro de los mexicanos, los ganadores fueron: Pável Pardo, Miguel Calero y Tomás Boy. En la categoría de Decano, Gustavo Peña y Tomás Balcazar (abuelo del Chicharito Hernández). Alicia Vargas fue la vencedora en la categoría femenil mexicana.

Después de la rueda de prensa donde se dieron a conocer a las nuevas leyendas que serán inmortalizadas en el Salón de la Fama, se ofreció una comida donde convivieron todos los votantes.

Y, para poner punto final a las actividades organizadas por el Salón de la Fama, nos trasladamos al Diario Marca. Juan Ignacio Gallardo, director del periódico, nos dio un tour por cada uno de los rincones del emblemático medio de comunicación más importante de España.

Fue sin duda alguna, una semana intensa, cargada de fútbol y de encuentros inolvidables. 

 

Visita a las instalaciones del Diario Marca.